SIN PRISA
Sin prisa
alguna
salvamos la
calle tomados de la mano
con la ternura a cuestas
y una botella de besos clandestinos,
justo del otro
lado de la acera
nos esperaba
la noche despeinada
y la locura
flotando entre los sueños.
Desde el
balcón a oscuras
escuchamos el
paso de las nubes,
el traslúcido
canto de la fuente,
y el tozudo ulular de las sirenas.
Y en la
búsqueda del uno contra el otro
no precisamos
de brújula ni luz,
nos encontramos
en el ansía guardada entre los huesos
en el sigilo de la piel desnuda.
DE LA NOCHE
Con la premura de las
hojas muertas
cae la última hora de
septiembre
apenas cruzando la avenida
palpitan semáforos en rojo
cortejados por el viento
norte
En algún lugar de la
ciudad
es muy probable
que vida y muerte caminen
de la mano,
que algún viejo al borde
del suicidio
se queje de dios y del
gobierno,
o que una niña
sueñe con gatos y
canarios,
incluso
también es muy probable
que no suceda nada.
Pero la noche
se pasa de largo sin mirar
mientras nosotros
(también a ciegas)
desafiamos la brevedad del
tiempo
en el hechizo de un beso
improvisado.
SECRETO
A MEDIAS
S
e m i d e s n u d a
te pones de pie al lado de la cama
y un trozo de luz esboza tu silueta,
mi camisa
es la única prenda que te cubre
y tu p i e l
se me revela como un secreto a medias;
te pones de pie al lado de la cama
y un trozo de luz esboza tu silueta,
mi camisa
es la única prenda que te cubre
y tu p i e l
se me revela como un secreto a medias;
Corres
despacio la cortina,
tu sombra y tú
se vuelven una sola con la noche,
y la ciudad se torna en un murmullo
del cual nos vamos olvidando.
tu sombra y tú
se vuelven una sola con la noche,
y la ciudad se torna en un murmullo
del cual nos vamos olvidando.
Entonces,
sin poder mirarte
adivino tu cuerpo junto al mío,
y en la oscuridad total que nos embriaga
germinan el beso y la caricia;
adivino tu cuerpo junto al mío,
y en la oscuridad total que nos embriaga
germinan el beso y la caricia;
y
las manos que siempre fueron torpes
van inventando su razón de ser.
van inventando su razón de ser.
AL
PASO DE LOS AUTOS Y LAS HORAS
Te
pienso así,
como en aquellas primeras tardes del otoño:
tomando café negro y sin azúcar
en la banca de un Oxxo,
mirando a través de la ventana
el paso de los autos y las horas
por la avenida gris
de una ciudad que no es la tuya.
como en aquellas primeras tardes del otoño:
tomando café negro y sin azúcar
en la banca de un Oxxo,
mirando a través de la ventana
el paso de los autos y las horas
por la avenida gris
de una ciudad que no es la tuya.
Tal
vez ojearás una revista
para espantar la lentitud del tiempo
y distraer la pena que te ocupa.
Acomodarás de nuevo tus cabellos
y al mirar el reloj te darás cuenta
que lo viste hace apenas tres minutos.
para espantar la lentitud del tiempo
y distraer la pena que te ocupa.
Acomodarás de nuevo tus cabellos
y al mirar el reloj te darás cuenta
que lo viste hace apenas tres minutos.
Quizá
te dé por recordar
que alguna vez ahí estuvimos juntos
e imagines también que yo te pienso
como en aquellas primeras tardes del otoño.
que alguna vez ahí estuvimos juntos
e imagines también que yo te pienso
como en aquellas primeras tardes del otoño.
SAL Y CANELA
Compartimos la mesa,
la sal y la canela,
el pan, la risa, la
añoranza,
compartimos también la
taza de café
en un intento por burlar el sueño.
Compartimos
(tal vez por accidente)
el roce vago de las manos
al querer tomar la servilleta.
Compartimos el sol de la
mañana,
y vimos juntos
al indeciso viento de noviembre,
arrastrando las hojas
quebradizas.
Compartimos
trozos de eternidad
por unas horas.
JUAN MARCELINO RUIZ. Nace en Cd. Juárez en 1963 y radica en Cd. Cuauhtémoc desde hace más de 25 años, donde se desempeña como profesor en una escuela de educación primaria. Ha pertenecido a diferentes talleres literarios, cursó un Diplomado en Creación Literaria. Ha publicado cuento y poesía en diversas revistas y diarios del norte y centro del país. Es autor de los libros: Derrepentes (1998), poesía, UACH; Quinteto para un Pretérito (2000), poesía, ICHICULT; Del Aleph a Guernica (2010) cuento, Ficticia Editorial; El Hormiguero (2012), novela, Doble Hélice; Delitos Menores (2014), varia invención, Abaleo Ediciones, entre otros.
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