SINOPSIS
El sueño de
Paloma Sanlúcar
es una novela que tiene como temas argumentales: la memoria, el amor, los
sueños, la enfermedad, pero sobre todo la escritura y el acto de escribir. Está
narrada en primera persona y el personaje principal es una escritora que
regresa —después de haberse ido y estar ausente por más de veinte años— a habitar
la casa de sus ancestros y ahí se encuentra con los recuerdos y las sombras del
pasado, lo que le hace suponer que los muertos nunca terminan de marcharse y
siempre están regresando al lugar que un día habitaron.
La protagonista del relato, quien es al mismo tiempo el personaje que
narra la historia, asume que carece de una existencia propia y lo único que
hace es seguir las huellas de los otros, principalmente las de la abuela: una
escritora frustrada que nunca publicó nada y terminó por abandonar todo lo
escrito; las de las madre: quien se suicidó un día tomándose una botella de
vino e ingiriendo un puñado de pastillas para dormir; pero sobre todo la
obsesiona la figura de una mujer que se le aparece en sueños.
La protagonista de la historia (quien se define a sí misma como
escritora de sueños) suele dialogar con las presencias fantasmales que
deambulan por la casa que habita y al mismo tiempo padece con frecuencia una
especie de déjà vu del que derivan
diferentes situaciones que la llevan a plantearse una serie de interrogantes; y
aunque es obsesiva y busca hasta donde sus fuerzas se lo permiten, no logra
encontrar todas las respuestas, por lo que le da por creer que su muerte pudo
haber sucedido hace muchos años y lo que ahora vive no es sino el sueño de
alguien más, una repetición de lo que ya
pasó.
EN LA OPINIÓN DE ANA CLAVEL
Una mujer, una escritora, regresa a la casa familiar después de veinte años de ausencia. En su paso por el mundo ha visto transcurrir la vida, el amor, la muerte, la soledad... Más allá de los naufragios y las singladuras, ha permanecido siempre, cual estrella de navegación, la escritura. A veces como condena, pero también como salvación que ella misma reconoce.
Cuaderno de escritura y reescritura, El sueño de Paloma Sanlúcar es también la búsqueda del origen de una lejana bisabuela andaluza, que viajó a Topolobampo para unirse a una colonia de artistas e intelectuales ideada por Albert K. Owen en 1886; pero también en los múltiples «yo» en que nos desdobla el acto empecinado de la creación. Más allá de la abstracción borgiana con el juego del doble, el lector descubrirá una sorpresiva e inquietante, perturbadora, vuelta de tuerca que subvierte los límites de realidad, fantasía y locura.
Dotada de una prosa reflexiva y sugerente, la pluma de esta autora creada por otra escritora, Ernestina Yépiz —en la que a su vez resuenan ecos de una tradición demencial y lúcida que va de Virginia Woolf a Elena Garro—, nos sitúa ante una paradoja hechizante de la identidad detrás de nuestros actos y de la escritura misma.
ERNESTINA YÉPIZ. Maestra en Literatura Iberoamericana,
egresada de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Autora de los
poemarios La Penumbra del paisaje, Los delirios de Eva, y Los conjuros del cuerpo; y, del libro de
relatos El café de la calle Mulberry.
Está incluida en Antología General de la
Poesía Mexicana, de Juan Domingo Argüelles; Una fiera lentísima (muestra de poesía sinaloense); Cuentos de dulce voluptuosidad, entre
otras publicaciones colectivas. Asimismo ha realizado las antologías: La desnudez de las palabras, selección
de la poesía de Norma Bazúa; Entre
sombras (relatos de suspenso y tinieblas), narrativa de Amparo Dávila; Las mariposas nocturnas y otros relatos,
narrativa de Inés Arredondo; El corazón
delator y otros relatos, de Edgar Allan Poe; En el andén de los sueños (narrativa experimental); Caminos que se bifurcan (narradores del
noroeste), entre otras. De igual forma es autora de Comer en Los Mochis: La cocina del festín y el agasajo; y, actualmente,
publica Fogones www.revistafogones.com.
0 Comentarios
Recordamos a nuestros lectores que todo mensaje de crítica, opinión o cuestionamiento sobre notas publicadas en la revista, debe estar firmado e identificado con su nombre completo, correo electrónico o enlace a redes sociales. NO PERMITIMOS MENSAJES ANÓNIMOS. ¡Queremos saber quién eres! Todos los comentarios se moderan y luego se publican. Gracias.